El melón es una de las frutas de temporada durante la primavera y aún más en verano. Asimismo, es una fruta dulce que nos ayuda a combatir el calor, ya que nos refresca, hidrata. Como consecuencia, es una fruta deliciosa que nos aporta numerosas propiedades nutricionales beneficiosas para nuestra salud.
Índice del contenido
¿Qué es el melón?
El melón (Cucumis melo) es una planta herbácea que crece a ras del suelo. Además, esta planta incluye más de 800 especies distintas. Se cultiva por su fruto, un fruto pepónide con cáscara dura y de temporada veraniega. Contiene con mucho contenido de agua, refrescante, de sabor dulce y que nos ayuda a hidratar nuestro organismo en épocas de más calor.
El melón (Cucumis melo) es uno de los frutos más grandes, junto con la sandía, con un peso que oscila entre los 500 g y los 5 kg aproximadamente. Como existen cientos de variedades de melón, existen diferencias en la corteza varía en textura y color (verde, amarilla, anaranjada o incluso blanca), al igual que la pulpa (de blanco amarillento a naranja, pasando por verde) pero todas las variedades coinciden en que están buenísimas.
Las variedades más conocidas y consumidas en España son el cantalupo, el charentais, el amarillo, el español, el galia, el serpiente, el honey dew y el branco, según el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación.
En España, podemos encontrar melón en los mercados entre los meses de junio y octubre. Lo podemos comprar más económico en épocas de mayor producción, que son los meses de la época estival.
El melón (Cucumis melo) está dentro de los alimentos clasificados como frutas dulces. Aunque es una fruta dulce, el melón tiene pocas calorías y es rico en sales minerales. Además, es un excelente fuente de provitamina A (beta-caroteno), vitamina C e hidratos de carbono.
Origen del melón
Según distintas referencias históricas, el melón ya se cultivaba en el Antiguo Egipto durante el III milenio a. C. Se han encontrado representaciones de este fruto en tumbas egipcias del 2.400 a.C. Se cree que es nativo de Irán, Anatolia y del Cáucaso, con un centro secundario en el noroeste de la India y Afganistán. En España fue introducida por los árabes tras la conquista de la península ibérica.
España es, en la actualidad, el principal país europeo en producción de melones, junto con Francia y Holanda. Las principales zonas productoras de melón en España son: Almería, Valencia, Castellón, Cuenca, Ciudad Real y Madrid.
Los navegantes españoles lo llevaron a América tras la conquista del nuevo mundo. Desde allí se extendió su cultivo por zonas cálidas y con pocas lluvias del continente americano.
Asimismo, Europa también importa estos alimentos de países con climas cálidos como Brasil, Costa Rica, Israel, Marruecos, Honduras, Ecuador etc.
Temporada del melón
El melón es sinónimo de verano. Por consiguiente, el tiempo más óptimo para su consumo es entre los meses de junio y agosto. Ciertamente, existen variedades con la que se puede alargar la temporada de mayo a septiembre.
Puedes consultar el calendario de la temporada de las frutas para poder consumir estos alimentos en su momento más óptimo. Además, cuando son de temporada nos aportan más beneficios para nuestra salud, tienen mejor aroma y están más sabrosas, entre otras ventajas.
¿Cómo se come el melón?
La forma más saludable de consumir la fruta y, en este caso el meón, es en su estado natural, ya que de esta forma conserva todas sus propiedades. Es una fruta que la comemos de forma habitual como fruta de postre durante los meses estivales. Su consumo es recomendado tanto de día como de noche gracias a sus beneficiosas propiedades que tiene para nuestra salud.
Una fruta para la elaboración de diferentes recetas
Sin embargo, es un ingrediente que se puede incorporar en numerosas recetas o preparados, tanto dulces como salados.
Es ideal para elaborar compotas, mermeladas, cremas, sorbetes o zumos.
Cada vez más el consumo del demón se utiliza como tentempié, elaborando deliciosos batidos nutritivos, refrescantes, hidratantes y bajos en calorías.
También permite preparar recetas de ensaladas veraniegas y macedonias. En época de más calor, Además, es importante hidratarnos comiendo fruta y verdura, sobre todo en época de más calor.
Las verduras son esenciales para llevar una dieta equilibrada. Las verduras, junto a las frutas, son los alimentos que más hidratación proporcionan al cuerpo. Es muy importante para nuestra salud, sobre todo en la época estival.
Existe un creencia que dice que no es bueno comer melón por la noche.
El melón es una de las frutas más consumidas en verano porque es un gran aliado para combatir el calor y la sed. Cenar de noche y a la fresca es algo habitual en épocas de más calor, cuando el día caluroso da paso a una noche fresca y agradable. El 80% del melón es agua, por lo que resulta una buena forma de combatir la sed, también de noche.
Sin embargo, existe la creencia de que comer esta fruta por la noche es malo porque provoca problemas digestivos. Nada más alejado de la realidad, ya que hay diversos estudio que recomienda comer esta fruta a cualquier hora del día, incluido la noche.
Propiedades del melón
El melón, a pesar de ser una de las frutas dulces, contiene mucha agua, aproximadamente el 80% de la composición. Asimismo, tan solo aporta 40 kcal por cada 100 gramos, una cantidad similar a la de las manzanas. Las pocas calorías que aporta se deben a su contenido moderado de azúcares. Por su bajo contenido calórico y efectos diuréticos el melón es elegido para dietas de control de peso.
Junto con la sandía es una de las frutas más apetecibles en verano y con unos beneficios para nuestra salud muy similares. El melón contiene mucha agua en su pulpa, como ya hemos comentado. Además, nos aporta pocas calorías, glúcidos, fibra, proteínas y escasa cantidad de grasas.
Un fruta que nos aporta vitaminas y minerales
También, el melón posee gran cantidad de betacaroteno (vitamina A), y vitaminas C y B9. Tanto la vitamina A como la C son antioxidantes y refuerzan el sistema inmunitario. La cantidad de betacaroteno depende de la cantidad de pigmento anaranjado que tiene en su pulpa junto a las semillas.
La vitamina C, con acción antioxidante, interviene en la formación de colágeno, huesos y dientes, glóbulos rojos y favorece la absorción del hierro de los alimentos y la resistencia a las infecciones.
El betacaroteno se transforma en nuestro organismo en vitamina A que es esencial para la visión, el buen estado de la piel, el cabello, las mucosas, los huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico
También tenemos que destacar que contiene potasio que explica su efecto diurético y contiene algo de fósforo, calcio y magnesio.
El potasio es un mineral con importantes funciones a nivel del músculo y del sistema nervioso. El magnesio interviene en el mantenimiento de los dientes y nos ayuda a tener un corazón y unos huesos sanos. Además, posee un pequeño efecto laxante bueno para una buena regulación intestinal.
Beneficios del melón
Además de las mencionadas en este artículo, el melón gracias a su gran cantidad de agua, potasio, ácido fólico y vitaminas antioxidantes lo convierte en un alimento ligero y muy saludable.
Depurativo natural
El melón es una de las frutas con mayor contenido en agua. Aproximadamente el 80% del melón es agua, por eso resulta excelente comerlo, especialmente porque su época de consumo es durante la época estival que es la época más calurosa del año y nos puede ayudar a tener un buen estado de hidratación.
Además de que el agua del melón nos hidrata, también tiene un efecto depurativo y diurético sobre nuestro organismo gracias a su gran aporte de agua, fibra y potasio.
Ayuda para depurar y a eliminar los desechos del organismo.
También es una ayuda para nuestra piel y es un detox natural que nos ayuda a eliminar toxinas y con los problemas de retención de líquidos. El melón favorece el funcionamiento de nuestros riñones y nos ayuda a prevenir patologías renales.
Ayuda a reducir la tensión arterial
Esta fruta es rica en antioxidantes que nos ayudan a combatir los daños de los radicales libres. Los antioxidantes de la fruta nos ayudan, entre otras cosas, a mejorar las defensas de nuestro sistema inmunitario y también a prevenir enfermedades cardiovasculares.
A la alta proporción de agua y potasio se suma su escaso contenido en sodio (20 mg/100 g), lo que permite incluirlo en los regímenes sin sal prescritos, una vez más, en casos de hipertensión o tensión alta, además de que es recomendado a personas con problemas de retención de líquidos.
Recomendado para dietas de pérdida de peso
Debido a su escaso aporte calórico y a su bajo porcentaje de azúcares, es recomendable para incluirla en dietas para el control del peso o incluso para dietas para personas con problemas de diabetes.
La fibra que contiene el melón nos ayuda a regular el tránsito intestinal y a mantener un colon saludable. Una correcta regulación intestinal en nuestro organismo nos ayuda contra el hinchazón, gases molestos y molestias gastrointestinales.
Por consiguiente, el melón que junto con la sandía que son las frutas estrellas del verano en muchos países con el hidratante perfecto sobre todo para las épocas de calor. Además tienen otras muchas propiedades que añadiendo su delicioso sabor es en consecuencia una fruta imprescindible en nuestra dieta.
Escribo sobre estilo de vida saludable, alimentación y fruta, mucha fruta. También me gusta compartir ideas para llevar una vida activa y sana. Consejos que pongo en práctica en primera persona, porque me preocupa mi salud y la de mi familia.